10/8/08

EXPERIMENTO AUTOMATISTA III

Una búsqueda a través de lo que siento exacto y lo que conozco.
Lágrimas marchitas viviendo su ocaso, nada es lo que busco al menos.
Sus días s cuentan al revés y calla. No quiere entender.
Solo se que todo vuelve a ser nimio si busco lejos.
Estamos todos, algunos lo sentimos más que otros, nada más.
Es ocre su escencia que baña mis manos, sus pies se vuelven sutiles.
Cada vez que creo poder, entiendo cuanto hay que sentir para volvernos tiempo sin agujas.

UN INSTANTE

Sería injusto conmigo mismo decir que no pretendo nada. Me asalta la necesidad de romance.
Ya pasó demasiado tiempo, y olvide como besar. Olvide como sostener las manos ajenas, olvide como recorrer un cuerpo dejando solo leves roces eléctricos en el mismo. Olvide todas las palabras que antes llenaban mi boca, todo el placer prohibido que deseaba callado.
Fui dejando atrás y se convirtieron en casi un recuerdo las caricias de los labios de quien alguna vez ame, quien alguna vez me quiso, quien ahora quiero, quien nunca volverá y a quien, aún hoy, deseo más que nunca.
Si bien aprendí a nacer y morir en cada beso, y sentir siempre esa maravillosa energía invisible recorrer mi cuerpo, fui olvidando como lograr llevar a mis labios hasta esos lugares tan edénicos, tan perfectos, tan preciados ahora, al estar tan lejos de ellos.
Las puertas del aliento, los humildes carceleros de las palabras. Quienes por lo visto siempre estuvieron dormidos, cuando estuve cerca de quien pretendí conquistar, de quien pretendo conquistar.
Me permiten hablar, si, me permiten relatar historias en lenguajes casi obscenos para la lógica cotidiana, pero totalmente adecuados para los momentos que ilusionados atribuimos al romance, y lograr el efecto deseado, pero así también permiten la fuga de ideas que solo deben revelarse en el momento adecuado, porque de no hacerlo así significaría el final de todo.
Y así, en este oscuro rincón que queda en Setiembre, sueño con poder concebir una noche de romance, un momento, un instante, toda una eternidad y más, a su lado.

27/5/08

EL HOMBRE GRIS

Mira sin ver y se regocija ante los colores que no percibe. Sonríe, aún cuando su existencia no se lo permite. El hombre gris se siente impotente ante el ocaso, busca en sus ojos y solo encuentra olvido, busca en sus manos, pero las sigue hallando vacías. Dibuja con su aliento un paisaje más benévolo, donde no tiene que pretender entender que es lo que lo mata. El hombre gris no pretende hallar perfección en su búsqueda a través del presente, solo quiere encontrar un poco de afecto ajeno y dormir en paz, solo por hoy. Ignora lo que se le viene encima, pero, en fin de cuentas, ¿quién lo sabe realmente? Se odia a si mismo por callarse o hablar de más, pero sabe que es un rasgo inevitable de su carácter. Es verdad, el hombre gris niega conocer el amor, aún sabiendo que estuvo enamorado, cree que no ha visto lo suficiente, que todavía no sintió todo lo necesario para llamar amor a lo que recorre su cuerpo cuando enfrenta a quien todavía quiere. Sus lágrimas están congeladas, por lo tanto no puede llorar, así que para poder sacar la tristeza de su cuerpo tiene que sonreír, y esto hace que algunos piensen que es feliz. El hombre gris tiene una última particularidad que lo hace perfecto. El sabe... y por eso se queda callado. No reprocha su esencia porque está consciente de su realidad. El hombre gris sabe que solamente es un personaje de un cuento, y no reprocha porque entiende que es el reflejo de quien lo inventó. Y así, en una melancólica mirada de eterna comprension calla, y esto lo hace perfecto.

14/1/08

CICLO

Extraño arbol que nos tiñe de miedo. Sagrado y pagano. ¿Como verse sin sentirse solo a traves del vidrio de la lejania?.
Sería superior el instante en el que encontrasemos las respuestas a nuestro infinito, pero luego sobrevendría un inexplicable e inutil vacio.
Mi sangre baña sus petalos, los recuerdos se vuelven piel y duelen, mucho mas que antes.
Extraño árbol que nos rige con su sabiduría. Experimentar en sus raíces los misterios de la edad. El inevitable envejecimiento de todo lo que morirá algún día.
Crecer y rendirnos parece lógico,ahora que su muerte es inminente.
Asi le gustaría ser recordado. Como magia y sabiduría; ilusión y mera labia.
Mi sudor se desliza por sus ramas, las historias se convierten en leyendas y mueren en los oidos escepticos de quienes vienen detrás, de quienes estaran adelante pronto.
Extraño ser inmaterial que nos acompaña con su silencio. Deja ir mis manos para que sueñen con tu follaje en otro tiempo. Mi misión será el llevarte de la mano a los ojos de quienes nunca te conoceran. El olvido nunca logrará encontrarte en un solo lugar. Si muchos te recuerdan, aun sin haberte conocido, podras perpetuarte para siempre.
Volvere a buscarte cuantas veces sea necesario, volvere a soñarte.
Mis lágrimas bañan su corteza, la vida se transofrma al siguiente y único estado que conoce y donde un cuerpo se esfuma nace un nuevo tipo de vida.